PARA APRENDER CON EL MUNDIAL
La escuela se juega
En las escuelas del país también se vivirá el Mundial de Fútbol Sudáfrica 2010, que arranca el próximo 11 de junio. Si bien durante el mes en el que se palpitará la Copa del Mundo las clase transcurrirán normalmente, distintas actividades y herramientas pedagógicas fueron puestas al alcance de docentes y alumnos para transitar este campeonato desde el lugar del conocimiento. En cada institución educativa del país se abordará el evento deportivo de manera diferente, con mayor o menor participación. Además, tal como lo dispuso el Ministerio de Educación de la Nación, los alumnos podrán ver en la escuelas los partidos de la Selección nacional.
Con la idea de que los chicos no dejen de ir a la escuela cuando juega la Selección argentina y más aún, aprovechar la motivación que despierta el campeonato mundial, en muchas escuelas del país las actividades de estudio girarán en torno de este tema. Las escuelas que tengan televisores o pantallas podrán transmitir los partidos de Argentina. En cambio, a aquellos que falten ese día a clases para verlo en su casa les correrá la falta normalmente. Del mismo modo, en las escuelas porteñas el horario escolar no se verá modificado.
En las pantallas gigantes que se instalarán en Plaza San Martín y en Parque Centenario habrá un espacio reservado para los más chicos, con juegos y actividades para que aprendan sobre los 32 países que jugarán el Mundial. El Ministerio de Educación porteño participará del acto inaugural, donde una de las escuelas del distrito realizará una representación apertura.
Distintas herramientas didácticas y pedagógicas serán puestas a disposición de docentes y alumnos para aprovechar el contexto futbolero. El manual didáctico Los medios y el Mundial de Fútbol Sudáfrica 2010 es una de las iniciativas propuestas por el Ministerio de Educación nacional. Este libro, con más de 30 páginas, propone más de 70 actividades vinculadas con las distintas materias: Historia, Geografía, Lengua, Educación Cívica y Literatura. Cada institución educativa y en particular cada docente aplicarán el contenido del manual a su manera. Las primeras páginas de este cuadernillo plantean conocer más sobre los países que participan, sobre el anfitrión y acerca de los jugadores. También, y como uno de los objetivos centrales, propone analizar el vínculo entre los medios y los mundiales de fútbol. En relación con este último punto, el libro brinda pautas para conocer, por ejemplo, cómo son representados “los otros” países que participan del Mundial y cómo somos representados “nosotros”.
“De todas formas, y más allá de que el manual no llegue a todas las escuelas, es importante que los docentes aprovechemos el Mundial para hacer alguna actividad porque los chicos están muy motivados”, aseguró Silvina Ibáñez, profesora de Historia y Geografía de tres escuelas secundarias de la provincia de Buenos Aires. La docente aseguró que son muchos los trabajos que se pueden hacer: “Por ejemplo, una línea de tiempo con los distintos mundiales de fútbol y sus principales características. También se puede proponer que cada alumno elija uno de los países competidores, investigarlos para luego exponerlos en clase”.
Gol de Pizarrón es una publicación de 68 páginas, que brinda información histórica, social, política, cultural y deportiva sobre todos los países que integran la Copa 2010. Además, hace un repaso por los distintos mundiales jugados hasta ahora, desde el primero, en Uruguay, en 1930. La revista elaborada por directores, docentes y egresados de la escuela de periodismo TEA y Deportea, bajo la dirección del periodista Juan José Panno, estará presente en 190 mil aulas del país. Esta es otra de las iniciativas del Ministerio de Educación, que además impulsó el libro ¡Partidazo!, del periodista Pablo Vignone –editor de la sección Deportes de Página/12–, que revive simbólicos y formidables partidos que sucedieron en la historia de los mundiales, desde sus inicios, “para que los estudiantes puedan conocerlos y comprender lo que cada país significó en su tiempo”, se explica en su introducción.
La escuela se juega
En las escuelas del país también se vivirá el Mundial de Fútbol Sudáfrica 2010, que arranca el próximo 11 de junio. Si bien durante el mes en el que se palpitará la Copa del Mundo las clase transcurrirán normalmente, distintas actividades y herramientas pedagógicas fueron puestas al alcance de docentes y alumnos para transitar este campeonato desde el lugar del conocimiento. En cada institución educativa del país se abordará el evento deportivo de manera diferente, con mayor o menor participación. Además, tal como lo dispuso el Ministerio de Educación de la Nación, los alumnos podrán ver en la escuelas los partidos de la Selección nacional.
Con la idea de que los chicos no dejen de ir a la escuela cuando juega la Selección argentina y más aún, aprovechar la motivación que despierta el campeonato mundial, en muchas escuelas del país las actividades de estudio girarán en torno de este tema. Las escuelas que tengan televisores o pantallas podrán transmitir los partidos de Argentina. En cambio, a aquellos que falten ese día a clases para verlo en su casa les correrá la falta normalmente. Del mismo modo, en las escuelas porteñas el horario escolar no se verá modificado.
En las pantallas gigantes que se instalarán en Plaza San Martín y en Parque Centenario habrá un espacio reservado para los más chicos, con juegos y actividades para que aprendan sobre los 32 países que jugarán el Mundial. El Ministerio de Educación porteño participará del acto inaugural, donde una de las escuelas del distrito realizará una representación apertura.
Distintas herramientas didácticas y pedagógicas serán puestas a disposición de docentes y alumnos para aprovechar el contexto futbolero. El manual didáctico Los medios y el Mundial de Fútbol Sudáfrica 2010 es una de las iniciativas propuestas por el Ministerio de Educación nacional. Este libro, con más de 30 páginas, propone más de 70 actividades vinculadas con las distintas materias: Historia, Geografía, Lengua, Educación Cívica y Literatura. Cada institución educativa y en particular cada docente aplicarán el contenido del manual a su manera. Las primeras páginas de este cuadernillo plantean conocer más sobre los países que participan, sobre el anfitrión y acerca de los jugadores. También, y como uno de los objetivos centrales, propone analizar el vínculo entre los medios y los mundiales de fútbol. En relación con este último punto, el libro brinda pautas para conocer, por ejemplo, cómo son representados “los otros” países que participan del Mundial y cómo somos representados “nosotros”.
“De todas formas, y más allá de que el manual no llegue a todas las escuelas, es importante que los docentes aprovechemos el Mundial para hacer alguna actividad porque los chicos están muy motivados”, aseguró Silvina Ibáñez, profesora de Historia y Geografía de tres escuelas secundarias de la provincia de Buenos Aires. La docente aseguró que son muchos los trabajos que se pueden hacer: “Por ejemplo, una línea de tiempo con los distintos mundiales de fútbol y sus principales características. También se puede proponer que cada alumno elija uno de los países competidores, investigarlos para luego exponerlos en clase”.
Gol de Pizarrón es una publicación de 68 páginas, que brinda información histórica, social, política, cultural y deportiva sobre todos los países que integran la Copa 2010. Además, hace un repaso por los distintos mundiales jugados hasta ahora, desde el primero, en Uruguay, en 1930. La revista elaborada por directores, docentes y egresados de la escuela de periodismo TEA y Deportea, bajo la dirección del periodista Juan José Panno, estará presente en 190 mil aulas del país. Esta es otra de las iniciativas del Ministerio de Educación, que además impulsó el libro ¡Partidazo!, del periodista Pablo Vignone –editor de la sección Deportes de Página/12–, que revive simbólicos y formidables partidos que sucedieron en la historia de los mundiales, desde sus inicios, “para que los estudiantes puedan conocerlos y comprender lo que cada país significó en su tiempo”, se explica en su introducción.
Fuente: Página 12 - 6 de junio 2010
